La aplicación de origen de EA, lanzada en 2011 como rival para Steam, finalmente está siendo reemplazada por la aplicación EA. Esta transición, sin embargo, viene con advertencias significativas. La experiencia del usuario torpe y los inicios de sesión frustrantes que afectaron el origen no se han resuelto por completo. Más importante aún, los usuarios corren el riesgo de perder acceso a sus juegos comprados si no transfieren activamente sus cuentas de origen a la nueva aplicación EA. Esto significa que los títulos comprados previamente, como Titanfall, podrían volverse inaccesibles.
Además de la frustración, la aplicación EA solo admite sistemas operativos de 64 bits, dejando a los usuarios de 32 bits en la cubierta. Si bien Steam también redujo el soporte de 32 bits a principios de 2024, este movimiento destaca las preocupaciones sobre la propiedad y el acceso digital. Es poco probable que los propietarios recientes de PC se vean afectados, pero los usuarios con sistemas Windows de 32 bits anteriores (como algunas versiones de Windows 10 vendidas hasta 2020) necesitarán actualizar su sistema operativo. Una simple verificación de RAM puede determinar si su sistema es de 32 bits (máximo de 4 GB de RAM).
Esta situación plantea preguntas sobre el futuro de la propiedad del juego digital. Perder el acceso a una biblioteca comprada debido a los cambios en el sistema operativo es una preocupación significativa, compartida por los usuarios de EA y Steam. La creciente prevalencia de soluciones DRM invasivas, como Denuvo, complica aún más las cosas, a menudo imponiendo limitaciones arbitrarias a pesar de la compra legítima.
Una solución potencial es admitir plataformas como Gog, que ofrece juegos sin DRM. El modelo de GOG asegura que los títulos descargados sigan siendo jugables en cualquier hardware compatible, indefinidamente. Si bien este enfoque abre la puerta a la piratería, también permite una experiencia de propiedad más segura y duradera, como lo demuestra el próximo lanzamiento de Kingdom Come: Deliverance 2 en la plataforma. El debate continuo entre la conveniencia y el control en el mercado digital continúa.