El director original de Silent Hill 2, Masashi Tsuboyama, elogió el remake y expresó especial entusiasmo por los nuevos jugadores que experimentan el clásico título de terror. En una serie de tweets del 4 de octubre, Tsuboyama transmitió su felicidad con el proyecto y destacó los avances en la tecnología de juegos que permiten una experiencia significativamente mejorada en comparación con el original de 2001.
Tsuboyama enfatizó las limitaciones de la tecnología del original, señalando el marcado contraste en las capacidades expresivas entre entonces y ahora. Citó específicamente la perspectiva mejorada de la cámara como una mejora importante, contrastando los ángulos fijos restrictivos del original con el realismo mejorado que ofrece el enfoque del remake. Admitió su insatisfacción con los controles de la cámara del original, atribuyéndolo a las limitaciones tecnológicas de su época. En su opinión, la cámara actualizada mejora significativamente la calidad de inmersión del juego.
Sin embargo, Tsuboyama expresó algunas reservas con respecto a la estrategia de marketing, cuestionando la efectividad de los elementos promocionales como el casco de bonificación por pedido anticipado (las máscaras Mira the Dog y Pyramid Head). Sintió que el enfoque en 4K, el fotorrealismo y estos elementos adicionales podrían eclipsar el atractivo principal del juego para los jugadores que no están familiarizados con el Silent Hill 2 original, diluyendo potencialmente el impacto narrativo deseado. Cuestionó el público objetivo de este enfoque promocional.
A pesar de esta pequeña crítica, la evaluación general de Tsuboyama es abrumadoramente positiva. Él cree que Bloober Team capturó con éxito la esencia de la atmósfera aterradora del original y al mismo tiempo presentó la historia de una manera que resuena en el público moderno. Este sentimiento se refleja en la reseña de 92 puntos de Game8, que elogió la mezcla de miedo y tristeza del remake, dejando un impacto emocional duradero en el jugador. La nueva versión, según Tsuboyama y los críticos, ofrece una experiencia aterradora pero emocionalmente resonante.