En medio de despidos generalizados en la industria, cierres de estudios y financiación reducida, los estudios de videojuegos enfrentan desafíos sin precedentes. Enrique Fuentes, CEO y cofundador de Teravision Games, experimentó esta turbulencia de primera mano tras el lanzamiento de Killer Klowns From Outer Space. A pesar de la recepción positiva —incluyendo un 7/10 de IGN elogiando su adaptación fiel de la película de culto— el estudio tuvo dificultades para asegurar nuevos proyectos en el difícil mercado de 2024.
Cambiando al Patio de Juegos Creativo de Fortnite
Enfrentando un futuro incierto, el equipo veterano de Teravision (cuyos miembros cuentan con 20 años de experiencia en la industria) recurrió a una solución inesperada: desarrollar dentro del ecosistema creativo de Fortnite. En un año, han producido tres juegos con Unreal Engine para Fortnite (UEFN), y su cuarto proyecto —lanzado hoy— utiliza el paquete de contenido oficial UEFN de The Walking Dead.
Su proyecto más reciente, Courtyard King, es un juego multijugador estilo Rey de la Colina ambientado en el universo de The Walking Dead. Desarrollado en asociación con Skybound Entertainment de Robert Kirkman, cuenta con modelos de personajes auténticos e incorpora elementos de la historia creados con los escritores de la IP original. "Nunca imaginamos colaborar con Skybound a través de UEFN", admite Fuentes, resaltando cómo el contenido generado por el usuario (UGC) se ha convertido en una fuerza mayor en los videojuegos.
La Ventaja de UEFN
Para los ingenieros de Teravision, el familiar framework de Unreal Engine de UEFN proporcionó una plataforma accesible para prototipado rápido. El diseñador de juegos Martin Rodríguez señala que las herramientas agilizan el desarrollo: "Elimina el trabajo repetitivo, permitiéndonos centrarnos en la experimentación creativa". Su primer proyecto UEFN, Havoc Hotel, evolucionó hasta convertirse en una popular serie roguelike de Fortnite, con la tercera entrega siendo un participante constante entre los mejores.
El director creativo LD Zambrano descubrió que los juegos UEFN requieren diferentes filosofías de diseño: "Son como experiencias de patio de juegos donde las interacciones sociales importan tanto como la competencia estructurada". Esta filosofía dio forma al innovador formato de partida infinita de Courtyard King, donde los jugadores pueden cambiar libremente de equipos a mitad de la partida para crear escenarios emergentes de traición al estilo de The Walking Dead.
Un Nuevo Modelo para Estudios Independientes
"UEFN ha cambiado completamente nuestro modelo de negocio", explica Fuentes. En comparación con los proyectos tradicionales de varios años, UEFN permite una iteración más rápida con un riesgo manejable: "Podemos mantener nuestro estudio de 80 personas mediante ciclos de desarrollo más cortos —semanas en lugar de años". Este enfoque da a los estudios independientes acceso a importantes IPs y bases de jugadores establecidas, manteniendo al mismo tiempo el control creativo.
Para los desarrolladores en dificultades que buscan alternativas a los modelos de publicación convencionales, el éxito de Teravision sugiere que UEFN podría ofrecer un camino viable hacia adelante —uno que combina el alcance de plataformas como Fortnite con la libertad creativa del desarrollo independiente.